Nuestras instalaciones, están adaptadas a los más pequeños para conseguir una gran colaboración de los niños.
Los tratamientos odontológicos en niños deben ser realizados con la mayor complicidad por parte de los padres y trabajamos con ellos para conseguir la máxima confianza de los peques y así obtener resultados duraderos en el menor número de citas posible.
Nuestro instrumental está adaptado a los más pequeños de la familia y disponemos de sala de espera infantil, radiología pediátrica así como baños adaptados.
La incorporación temprana de los niños a la consulta dental, permite acostumbrarles fácilmente a esta nueva experiencia e ir acercándoles al conocimiento de las instalaciones y el personal que va a trabajar con ellos. De esta forma, la exploración bucal y las medidas preventivas que son utilizadas en odontopediatría, son entendidas por los niños como una rutina más de las muchas que, a esa edad, están incorporando en sus vidas.
Nuestros profesionales están entrenados en el manejo del niños y pacientes jovenes. Tanto profesionales como padres deben aceptar que el llanto del niño no significa falta de cooperación sino desconocimiento del medio.
Informamos a los padres de que las visitas al dentista no son similares a las visitas al pediatra. Las citas en odontopediatría tienen una duración de 30 minutos máximo y pueden ser más cortas o largas dependiendo de la colaboración y madurez del niño.
Actualmente se considera que la primera visita al odontopediatra debe hacerse a los dos años de edad, siempre que no exista patología que aconseje adelantarla.